Ritmos latinos
Quizás, quizás, quizás
Existen canciones que pueden
hechizarnos y hacernos
silbar o
cantar un verso. La melodía es tan irresistible que aunque
no sepamos la letra, nos
vemos obligados a
tararear. Quizás escucharon
sólo unas cuantas notas en la radio, o quizás alguien dijo algo que
les hizo pensar en ella. Una vez que la
semilla de una canción
inolvidable es plantada, la música
te persigue como un
fantasma melódico
a través de tu día. Una de esas canciones, irónicamente, es:
Quizás, quizás, quizás.
Siempre que te pregunto
Qué, cuándo, cómo y dónde
Tú siempre me respondes
Quizás, quizás, quizás.
Y así pasan los días
Y yo, desesperando
Y tú, tú contestando
Quizás, quizás, quizás.