¡Hola a todos, y bienvenidos a nuestro programa informativo semanal! Yo soy Verónica. Hoy estamos a miércoles 10 de abril de 2019. Esta semana comentaremos la maratón de Pyongyang, en la que han participado un número récord de corredores extranjeros. Además, hablaremos sobre la despoblación progresiva que sufren muchas provincias españolas, la recién aprobada ampliación de los permisos de paternidad a ocho semanas, y la conmemoración del 80º aniversario del final de la guerra civil española. Tendremos tiempo también para hablar de los actos de homenaje a las víctimas del genocidio de Ruanda, del que acaban de cumplirse 25 años.

Pero vamos a empezar por Corea del Norte…

Nelson Mandela dijo una vez: “El deporte tiene el poder de transformar el mundo, el poder de inspirar y de unir a la gente como pocas otras cosas”. Y, en mi opinión, tenía toda la razón. A menudo, el deporte ha servido como herramienta para la superación de conflictos, para acercar a los pueblos y conectar entre sí a los seres humanos, independientemente de su origen, raza u orientación sexual.

En España, la actualidad de la semana ha estado marcada por las manifestaciones convocadas por “La Revuelta de la España vaciada”, un movimiento que pretende protestar contra la despoblación del medio rural.

El pasado 31 de marzo, miles de personas tomaron las calles de Madrid para denunciar la progresiva despoblación que padecen muchas regiones del país. Un fenómeno que se conoce como “la España vaciada”. Hartos del abandono y la desatención que sufren, los manifestantes pidieron más inversiones públicas, mejoras en las infraestructuras y la puesta en marcha de medidas para frenar la emigración a las grandes urbes.

En las últimas décadas, 3.000 pueblos y aldeas han sido abandonados completamente; la mayoría en comunidades autónomas como Galicia, Castilla-León, Asturias o Aragón. Pero el éxodo no

Uno de los factores que inciden en la despoblación del medio rural es la baja natalidad que hay en España. En combinación, a menudo, con las dificultades para conciliar la vida laboral y familiar. Para hacer frente a este problema, el parlamento español acaba de aprobar la ampliación progresiva de los permisos de paternidad, que en 2021 se igualarán con los de maternidad.

El Congreso de los Diputados acaba de dar luz verde a la ampliación de los permisos de paternidad. Desde el pasado 1 de abril, los padres españoles ya pueden disfrutar de ocho semanas de baja. Las dos primeras deberán cogerlas obligatoriamente tras el nacimiento o la adopción de sus hijos, mientras que las seis restantes podrán repartirlas a discreción durante el primer año.

Además, la reforma establece que la ampliación de los permisos de paternidad será gradual. El año que viene los padres disfrutarán de 12 semanas, y en 2021 de 16. Será entonces cuando las bajas de paternidad y de maternida

Esta semana España ha rememorado los 80 años del final de la Guerra Civil. El debate sobre la exhumación de los restos del dictador Francisco Franco, el reciente rebrote de la extrema derecha, o la intención de algunos partidos políticos de revisar la ley de Memoria Histórica —o sea la ley que reconoce a las víctimas de la dictadura— convierten este aniversario en un tema de gran actualidad.

El pasado 1 de abril se cumplieron 80 años del final de la Guerra Civil, el capítulo más trágico de la historia contemporánea de España. Nunca será posible determinar con exactitud el número de muertos causados por el conflicto, pero las estimaciones más realistas hablan de medio millón de fallecidos. La represión de la posguerra dejó además cerca de 100.000 personas desaparecidas. La mayoría de ellas fueron fusiladas y enterradas anónimamente en fosas comunes. A día de hoy, sus familias las siguen buscando, con la esperanza de poder recuperar sus restos mortales y darles una digna sepultura.

La Guerra Civil española fue una de las grandes tragedias del siglo pasado, pero no la única. Las dos guerras mundiales, la Revolución Cultural china o los genocidios de Armenia, Camboya o Ruanda dan testimonio de las barbaridades que es capaz de cometer el ser humano. Justamente el pasado 7 de abril se ha conmemorado en Ruanda el 25º aniversario del genocidio.

¿Os imagináis que toda la población de Alaska fuera exterminada en tan solo tres meses? Algo parecido ocurrió en Ruanda, en el corazón de África, hace 25 años. Más de 800.000 personas fueron asesinadas en el espacio de cien días, en uno los genocidios más cruentos y mejor organizados del siglo XX. La masacre fue el resultado de décadas de enfrentamiento entre hutus y tutsis, dos grupos étnicos con lengua y tradiciones idénticas que el colonialismo europeo segregó artificialmente para servir a sus intereses.

El detonante del genocidio fue el asesinato del presidente hutu Juvenal Habyarimana, el