Nuestro siguiente asunto, en el plano internacional, nos llevará a analizar las revueltas que en diversos países protagoniza la llamada ‘Generación Z’. Estos jóvenes, hasta ahora vistos como pasivos y conformistas, están saliendo a las calles en países tan dispares como Perú, Marruecos o Nepal para reclamar sus derechos y exigir mejoras democráticas. Y todos lo hacen tras una misma bandera, que no pertenece a ningún partido o ideología política.
Regresaremos luego a la actualidad latinoamericana, para entender por qué Costa Rica se ha convertido en un polo de atracción para las grandes fortunas globales. El pequeño país centroamericano es una anomalía en la región por su elevado nivel de vida y sus facilidades fiscales, aunque no todo es color de rosa: el alza en el costo de vida afecta cada vez más a la población local. Nos desplazaremos luego hacia Argentina. Allí, un equipo multidisciplinar de científicos e ingenieros ha diseñado un pequeño satélite, llamado Atenea, que viajará al espacio en la nueva misión que la NASA enviará a la órbita lunar en 2026. Todo un logro para la ciencia argentina, en un contexto de severos recortes por parte del Gobierno de Milei.
Finalmente, nuestro recorrido por la actualidad concluirá con una historia de película: la peripecia del violín que tocaba Albert Einstein en los años en que concibió la Teoría de la Relatividad y ganó el Nobel. Ese icónico instrumento, que el genio tuvo que regalar cuando huyó de la Alemania nazi, ha sido identificado después de tantas décadas y acaba de ser subastado en Reino Unido… por más de un millón de dólares.
Cuando pensamos en las personas que han ganado el premio Nobel de la Paz, nos vienen a la cabeza nombres de figuras rodeadas casi de un halo de santidad. Por ejemplo, Nelson Mandela, María Teresa de Calcuta, Rigoberta Menchú o la joven pakistaní Malala. Sin embargo, la lista de premiados también incluye nombres que han generado controversia. La semana pasada, se sumó uno más: el de la opositora venezolana María Corina Machado. Pocas figuras polarizan tanto a la opinión pública mundial como ella.
El jurado de este Nobel, el único que se decide en Noruega y no en Suecia, describió en su fallo a M
Decía el filósofo George Santayana que quien no conoce el pasado está condenado a repetirlo. Pero a veces, ante las injusticias, repetir el pasado es una obligación. Como ya ocurrió en Mayo del 68, en las Protestas de Tiananmén, o en la Primavera Árabe, los jóvenes de medio mundo –desde Perú a Nepal y desde Madagascar a Marruecos e Indonesia– están volviendo a las calles para reclamar sus derechos.
Pertenecen a la llamada ‘Generación Z’, y hasta ahora habían sido vistos por sus mayores como chicos frívolos, acomodaticios, con poca conciencia social y el seso sorbido por las redes sociales. Pe
No me sorprende que cada vez más millonarios elijan Costa Rica como el lugar ideal para establecer su residencia y, también, la de su dinero. La élite global busca un refugio políticamente seguro, verde y estable, y Costa Rica ofrece todo eso. Según el último informe de la consultora Henley & Partners, en la última década, unos 8.400 extranjeros acaudalados se radicaron en este pequeño país centroamericano que ya ocupa el sexto lugar en el ránking mundial de grandes fortunas.
El 60% de estos inmigrantes de lujo no provienen de Latinoamérica, sino de países como Estados Unidos, Canadá, China o
“Soy de Argentina y estoy muy interesado en saber todo sobre la Luna”. El científico Hernán Socolovsky tenía solo 12 años cuando envió una carta a la NASA con esta frase. Por eso puedo imaginar su euforia –y la de todo el equipo argentino en el que trabaja– cuando supo que su microsatélite Atenea formará parte de la misión tripulada Artemis II, con la que la NASA quiere que cuatro astronautas orbiten alrededor de la Luna en 2026. La de Argentina será la única aportación latinoamericana a este trascendental proyecto que culminará un año después, en 2027, con un alunizaje humano, el primero en m
En la vida no hay demasiadas ocasiones para compararse con un genio como Albert Einstein, pero una curiosa noticia hará que mucha gente pueda identificarse con el legendario físico, aunque no por sus excepcionales habilidades intelectuales. Lo cierto es que Einstein, como tantas otras personas, tocaba por mero placer un instrumento musical. En su caso, un violín. El mismo que, tras una intrincada peripecia, ha sido subastado la semana pasada en Reino Unido por algo más de un millón de dólares.
Einstein, como tantos otros músicos aficionados, no buscaba la perfección, sino el simple placer de t